Esta serie de obras tuvo su origen en la simbología de la casa portada por el caracol. Por analogía se usó una especie de sombrero a modo de contenedor en el que los diferentes personajes guardan su identidad. Cada sombrero es al tiempo un signo de poder, de autoridad en clara alusión a las .

Predomina la configuración vertical en la que una cabeza vociferante sustenta esa especie de sombrero-contenedor.

Los materiales se centran en el hierro forjado, la madera y el bronce

Sus alturas oscilan entre los 30 y los 120 cm.